La Previa: Liverpool - Manchester City

by - enero 24, 2012


A un paso de Wembley.



Con las duras declaraciones de Kenny Dalglish tras la derrota en Bolton como telón de fondo, Liverpool y Manchester City se disputan una plaza en la final de Wembley, con la ventaja del gol de Steven Gerrard para los nuestros. No únicamente el técnico escocés exige un cambio en la actitud mostrada por el equipo en los últimos compromisos. También y principalmente la afición, que ve con frustración como el objetivo de la Champions League se esfuma ante la pasividad o falta de compromiso de los jugadores. La Carling Cup quizás sea un título menor, pero es un título al fin y al cabo. Llegar a la final dejando en el camino a equipos como Chelsea y Manchester City, debe servir como demostración al equipo de que están capacitados para afrontar objetivos mayores. Por todo ello, mañana hay algo más en juego que una simple plaza en una final. El Cardiff City esperará al equipo clasificado en Wembley tras clasificarse por penalties ante el Crystal Palace.

Por Stubbins. (@El_Stubbins)

Que un equipo como el Liverpool no pise el césped de Wembley desde 1996, no es una muy buena señal. Bien es cierto que mientras el mítico estadio londinense era remozado, el club de Anfield disputó varias finales coperas en el Millenium Stadium de Cardiff, estadio que sería designado como sustituto para la celebración de las grandes finales futbolísticas inglesas. Aún así, desde que el nuevo Wembley abriera nuevamente sus puertas en el año 2007, el conjunto Red no ha puesto pie en la catedral mundial del fútbol, y por lo tanto, todavía no ha tenido la oportunidad de subir victorioso esos 39 escalones que conducen hacia la gloria a los que salen vencedores del hoy moderno recinto.

Mañana el Liverpool tendrá la oportunidad de conseguir esa posibilidad. Con un gol de ventaja sobre el Manchester City obtenido en el partido de ida en el Etihad Stadium, los de Dalglish parten con un trecho del camino ya realizado. Un gol que en el caso de empate global a la finalización del partido, no tendría el valor doble de los goles marcados fuera de casa. Un valor doble de los goles, que sí se aplicaría si la prórroga acabara con resultado de empate, tal y como dictan las curiosas normativas de la competición.


David Silva con su privilegiada visión del fútbol, es siempre un peligro.


Pero a nadie se le escapa que ni por el rival ni por la situación anímica en la que llega el equipo Red, el cometido de mañana será ni mucho menos fácil. En el ambiente del vestuario, seguramente todavía atronan las duras declaraciones de Kenny Dalglish contra sus jugadores. Declaraciones que por muy duras y enérgicas, no han sido en ningún momento cuestionadas por ninguno de los receptores de las públicas críticas. Hecho que hace pensar que el vestuario ha sabido aceptar su gran parte de culpa en la inexistente actitud mostrada en las últimas actuaciones. Algo a lo que el cuerpo técnico también debiera reconocer su parte de responsabilidad por la incapacidad para transmitir la necesidad de mostrar un comportamiento acorde a un equipo profesional.

Kenny Dalglish cuenta con todos sus efectivos a su entera disposición, salvo las ya consabidas ausencias por sanción y lesión de Luis Suárez y Lucas Leiva respectivamente. Tan solo Jay Spearing es duda para el partido de mañana al no estar plenamente recuperado de la lesión muscular sufrida precisamente en el partido de ida en el Etihad Stadium.


Agger y la zaga Red deberán de estar pendientes de las acciones de la poderosa delantera Citizen.


En el bando del Manchester City, la eliminatoria viene marcada por el nombre de Mario Balotelli. El polémico y controvertido delantero italiano está pendiente de una suspensión de cuatro partidos impuesta por la Football Association por su impresentable agresión a Scott Parker en el partido del pasado domingo. Si el club de Eastlands presenta una alegación a esa suspensión antes de las 18:00 hrs de mañana, Balotelli sería alineable para Roberto Mancini en Anfield. Todo parece indicar que dada la obscenidad y claridad de la acción del goleador italiano, el club Citizen obviará esa presentación de alegaciones, con lo que Balotelli iniciaría mañana esa sanción de cuatro partidos.

También se perderá el enfrentamiento por sanción uno de los puntales en la zona defensiva del equipo de Roberto Mancini. Vincent Kompany cumplirá mañana su último partido de sanción de los cuatro impuestos por su polémica expulsión en el derby de Manchester. El defensa serbio Savic ocupará su plaza junto a Lescott, Una dupla defensiva central que no ha ofrecido demasiada seguridad, y ha encajado goles y concedido excesivas facilidades a las delanteras rivales.


Es muy problable que Mancini se pueda ahorrar una nueva bronca a Balotelli como la ocurrida en el duelo de Premier en Anfield.


Si las sanciones acotan las opciones de Mancini en la elaboración de un once titular, también lo hacen las ausencias de los hermanos Kolo y Yayá Touré por la disputa de la Copa de Africa de las Naciones de Guinea-Ecuatorial y Gabón. Aún así, el amplio potencial de la plantilla que dirige Roberto Mancini, ha permitido al Manchester City reafirmarse en lo más alto de la clasificación liguera, tras superar el duro escollo del enfrentamiento del pasado fin de semana ante el Tottenham Hotspurs, uno de los equipos decididos a plantar cara en la pugna por el título. La moral de los de Manchester por tanto, se estima muy alta.

Con siete títulos en su haber, el Liverpool es el club con mayor número de entorchados en esta competición. Los clubes protagonistas de la eliminatoria, se han enfrentado en tres ocasiones en League Cup con dos desenlaces favorables a los Reds (1980/81 y 1995/96) por uno de los Citizens (1969/70). Mañana no hay que dar opción a empatar esa estadística.

El vencedor de la eliminatoria se enfrentará al Cardiff City en la final de Wembley. El equipo galés se clasificó ayer tras equilibrar el marcador, 1-0, en los 90 minutos. En la prórroga no hubo goles, aunque los bluebirds gozaron de las mejores ocasiones, y finalmente en los penalties se mostraron más acertados, y vencieron por 3-1.

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