Liverpool 0-0 Stoke City

by - octubre 07, 2012



Sobrados de ideas, carentes de gol.


Se repiten los acontecimientos. El Liverpool sigue buscando su primera victoria de la temporada en Anfield tras haber desplegado nuevamente un fútbol ofensivo pero inoperante de cara a puerta. El equipo de Rodgers supo superar la incómoda e incluso violenta presión visitante durante la primera media hora de juego, pero fue incapaz de batir el marco rival. Los tres balones estrellados al palo pudieron haber cambiado el signo del partido, pero el infortunio y el mal fario persiste en Anfield.

Por Stubbins. (@El_Stubbins)

Brendan Rodgers repetía la alineación que tan buen resultado le dió la semana pasada en Carrow Road. Ocho días antes, el centro del campo Red superaba fácilmente la oposición del rival con un fútbol al primer toque y de continuos movimientos sin balón. Todo salía bordado, sin duda, por la indolencia del equipo rival. Una inoperancia defensiva que hoy no ha repetido el Stoke City. Un equipo con un ADN de futbol destructivo y de ahogo al rival, que se le ha atrangantado al Liverpool. El equipo de Toni Pulis, es un equipo de oficio. Sabe a que juega, cómo lo debe hacer y lo desempeña a la perfección.

Bien es cierto que el fútbol de presión y de desactivación creativa del rival que ofician los Potters, ha sido llevado en el día de hoy rallando el límite del reglamento. En apenas un cuarto de hora, los de Tony Pulis bien podrían haber recibido dos amarillas y una roja directa. La expulsión más que merecida de Ryan Shawcross tras un pisotón intencionado sobre Suárez, al que el árbitro del encuentro hizo caso omiso. Ha sido tan solo una de las múltiples acciones del equipo visitante, principalmente sobre el delantero uruguayo, que el árbitro debió atajar de inmediato mostrando tarjetas. Algo de lo que Steven Gerrard en su función de capitán debió recriminar de inmediato al colegiado. Lo hizo, pero algo tarde.


Pero no solo el Stoke se dedicó a anular el juego de los de Brendan Rodgers. Los Potters, estuvieron a punto de adelantarse en el marcador tras dos erróneas acciones de un confiando Pepe Reina con su juego con el balón en los pies. En la primera Charlie Adam y en la siguiente Kightly, se encontraron con la buena actuación del meta Red, que subsanaba su error con dos buenas paradas.

Mucho tardó el Liverpool en quitarse de encima la presión rival. A ello colaboró un magnífico Joe Allen que encontró en Suso en su mejor lugarteniente para sacar adelante al equipo. La primera ocasión clara de gol local, la protagonizó Steven Gerrard con un disparo desde fuera del área al que Begovic respondió con una gran parada. A partir de aquí, Suso se erigió en el gran protagonista. Su inteligencia y fantasía rompieron el partido en favor de los de Anfield. Lamentablemente, sin definición por parte de una delantera encabezada por un batallador pero desafortunado Luis Suárez.


En el segundo tiempo tan solo existió el Liverpool. Los de Rodgers buscaron de todos los modos posibles el marco rival. Con balones largos en diagonal, como el que envió Gerrard a una incorporación de Glen Johnson, al que el lateral inglés tras un magnífico control, no acertó a rematar a puerta. También lo intentó con los driblings y acciones individuales de un Luis Suárez voluntarioso pero falto de inspiración de cara a puerta. Su ocasión en el minuto 58 en la que se deshizo de varios rivales, disparando a puerta ligeramente desviado, fue el preludio de su particular infortunio de cara a puerta. También Daniel Agger con incorporaciones con el balón controlado desde la zaga lo intentó.

Si alguien trabajó y bregó tanto defensiva como ofensivamente, ese fue Raheem Sterling. El jugador de orígen jamaicano, jugó hoy su partido más completo desde que debutara con el primer equipo. Sterling colaboró incansable en la recuperación y tanto por banda derecha como por la izquierda fue un peligro constante para la defensa Potter. Sterling dispuso de la mejor ocasión para estrenar el marcador cuando tras recibir completamente solo en el interior del area, envió un disparo a la base del palo. También con el palo se topó Luis Suárez poco después.


Los minutos pasaban y Rodgers buscaba soluciones. El técnico norirlandés decidió sentar al jugador que más estaba desiquilibrando el partido, Suso, para dar entrada a Joe Cole. El cambio resultó infructuoso. También Assaidi, el joven jugador marroquí entró en el terreno de juego dando descanso a Nuri Sahin. Todo era insuficiente para hacer caer el cerrojo del Stoke. Como última oportunidad, Martin Skrtel en un remate en semi-fallo, envió de nuevo el balón a la madera ante la mirada de Suárez. Una tarde inexplicable. Una más.

FICHA DEL PARTIDO:

LIVERPOOL: Reina, Wisdom, Skrtel, Agger, Johnson, Gerrard, Allen, Sahin (Assaidi 79), Suso (Cole 67), Suarez, Sterling.

STOKE CITY: Begovic, Cameron, Huth, Shawcross, Wilson, Walters, Nzonzi, Whelan (Whitehead 20), Adam (Edu 80), Kightly (Etherington 63), Crouch.

Árbitro: Lee Mason. Amonestó a Huth, Kightly, Shawcross, Adam, Walters y Whitehead, todos ellos del SCFC.

Estadio:  Anfield, 44.531 espectadores.

LAS NOTAS DE ESTO ES ANFIELD

"KING" KENNY DALGLISH: Raheem Sterling. El canterano cuajó su partido más completo desde que saltara al primer equipo del Liverpool. A sus habituales desbordantes acciones ofensivas, Sterling añadió un sacrificio defensivo enorme con continas ayudas defensivas. Lamentablente, su buena actuación no pudoser refrendada con un gol. El palo se cruzó en su camino.  


CALIDAD JOHN BARNES: "Suso" Fernández. El Liverpool encontró en la calidad, fantasía y clarividencia del algecireño, la mejor arma para superar el rocoso muro defensivo diseñado por Tony Pulis que hasta el momento anuló durante media hora el creativo medio campo Red. 


CALAMITY DAY: Charlie Adam. El regreso del jugador escocés a Anfield estuvo plagado de despropósitos con entradas duras y acciones desacertadas. Aún así, Adam dió un buen susto al marco de Pepe Reina en los minutos iniciales del partido.  


RASCA RAZOR: Ryan Shawcross. Toda la defensa Potter se ejercitó al límite del reglamento con gran dureza, especialmente en los minutos iniciales. Unos minutos en los cuales Shawcross debió de ser expulsado por una clara agresión a Luis Suárez, al pisarle descaradamente en su espalda cuando éste se encontraba en el suelo. El árbitro ordeno que el juego siguiera.


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