Carta de un aficionado del Liverpool para Pepe Reina.

by - agosto 14, 2014


De un red para uno de los nuestros



Hace pocas fechas se despedía Pepe Reina de la afición del Liverpool mediante una carta en su portal web, está carta la realiza un redactor nuestro, Jesús Ruiz, pero que la hacemos de todos los que formamos Esto es Anfield, gracias por todo Pepe.


Querido Pepe:

Escribo esta carta mientras te veo al fondo de un plano televisivo en el que Pep Guardiola está dando órdenes durante el partido de la Supercopa alemana que juega tu Bayern de Múnich contra un Dortmund al que, por cierto, hace unos días hemos aplastado en un amistoso que nos ha servido para elevar un poquito más el ánimo de cara al inicio de la temporada, aunque, ya sabes, que esto no suele costarnos mucho a los reds. Pero para algunos (diría que muchos, aunque sinceramente da igual el número) no nos viene mal un extra porque realmente nos hemos quedado algo apenados con tu marcha. No por lo puramente deportivo (ya llevábamos la vacuna de la cesión al Nápoles), que también. Aunque ello no quiero valorarlo aquellos que no se molestaban en verte ganar los 'guantes de oro' de la Premier League en 2006, 2007 y 2008  y te criticaban por los puntuales errores que sufrías en las ocasiones que te ponías bajo los palos de la Selección española, o que incluso dudaban de tu inclusión en las listas de convocados que a posteriori dejaron por primera vez en la historia de España un Mundial y dos eurocopas seguidas (de los que 'rajaban' ninguno podrá llevar eso en su currículum nunca).

Ya sabes, la etiqueta del 'gracioso' fue arma arrojadiza de alguno para encasillarte en un rol que, personalmente y como aficionado del Liverpool, ya te digo que me ha encantado siempre. No es humor 'scouse' el de los Reina, para que engañarnos, viene más bien del sur de España, de Córdoba y tiene otro punto pese a ser igualmente de carismático y pegar tan bien con el sentir de la ciudad del Mersey. 

Peor para ellos. Esos que no te veían jugar en Inglaterra y que solo se quedaban con lo del "¡Camarero!" en las celebraciones con la Selección, se perdieron a uno de los mejores porteros en la historia del Liverpool FC. Tremendamente ágil, con un saque en largo (con píes y manos) que iniciaba las jugadas de ataque, dando seguridad y liderazgo a la defensa, experto parador de penaltis o un inmejorable juego con los píes son algunas de las excelentes características técnicas que mostraste en Liverpool. Pero no, no quería discutir de lo deportivo pese a que estemos hablando del jugador número 27 que más veces (394 encuentros) se ha plantado el Liverbird sobre el pecho en toda la historia de este club o del que tiene el record de mayor tiempo imbatido defendiendo la portería red. 

Estoy apenado por tu marcha porque eres uno de los nuestros. Muchos han pasado por este equipo y muchos son los que incluso no saliendo de la mejor manera en su momento, acaban por tener el perdón de Anfield y reciben el cariño de una parroquia que para eso, también lo conoces, es especial. Pero ser uno de los nuestros es un paso más y tu eso lo has logrado al defender esta camiseta de la manera que hay que hacerlo, colocando al club en su lugar. Muchas imágenes se me vienen a la cabeza: Postrado de rodillas con las manos en la cabeza nada más haber convertido al Liverpool en campeón de la FA ante el West Ham; la mágica noche de la semifinal de Champions ante el Chelsea y tu abrazo a Kuyt tras el penalti decisivo; la carrera cruzándote todo el campo para ir hasta The Kop a abrazar a Ngog tras su gol al United; el estallido de júbilo tras ganar la Capital One o incluso (y permíteme la broma) el gol más raro que he visto en mi vida y que encajaste ante el Sunderland cuando el balón rebotó, sí, en una pelota de playa. 

Sin embargo, las cosas que te han convertido en aún más especial no han sido simples instantáneas de éxitos deportivos. Han sido tus siempre cariñosas declaraciones para las familias de los afectados por la tragedia de Hillsborough, tu madera de capitán (con o sin brazalete en el brazo) respaldando y ayudando a tus compañeros, el respeto para Steven Gerrard calificándole siempre como inspiración e incluso como mejor jugador en la historia del Liverpool, la veneración a la historia del club o como te mantuviste en un barco que pasó por una de sus peores épocas como institución justo antes de la llegada de los actuales dueños. 

Fue leyendo una entrevista que te realizaron en el diario 'El País' en aquellos momentos, cuando tuve claro (si no lo tenía ya) que para la memoria red no serías uno más. 

Periodista: "¿Qué queda del 'Spanish Liverpool'?"

Reina: "Nunca fue un 'Spanish Liverpool'. Hubo una época con jugadores y un técnico y hasta un acento determinado, pero el Liverpool ha sido el Liverpool por encima de todo. Eso es lo que ha sido, lo que es y lo que será siempre".

Es decir, sentiste y pusiste al el Liverpool en su lugar, "por encima de todo", para ponerte tú en un lugar especial en nuestros corazones. Y eso, el reconocimiento de la gente y el cariño que en esa ciudad siempre te tendrán a ti y tu familia (incluidos, por supuesto, tus pequeños cuatro casi 'scousers'), es lo que te llevas. Porque conociéndote, seguro que te parece eso más importante que los cuatro títulos que levantaste en tus ocho años de rojo. Incluso más que el hecho de que haya fotos tuyas colgadas del lugar donde antes estaba mítico y desaparecido 'Boot Room' de Anfield (un sitio único). O puede que también más que la importancia de ser destacado entre los mejores de la historia de este legendario equipo en el museo del club. Y sé que seguramente sea así porque, junto con lo que nos has mostrado, tengo informaciones de primera mano (amigos y conocidos en común) que califican a 'los Reina' como "gente de verdad, de la que vale la pena. Únicos. Auténticos fenómenos".

Como te decía, todo esto lo escribo y lo siento mientras te veo ya como jugador del Bayern. Y aunque no se me hace raro, no sólo porque, como ponías en tu carta, ya el año pasado tuviéramos una previa de la despedida final (es cierto que verte con Rafa Benítez ganando una Copa en Italia pues le dio a todo un tinte más familiar), sí que admito que no puedo evitar que algo de leve tristeza me invada. 

No queda otra que eliminarla rápidamente. Porque el mundo del fútbol es así (igual de rápido y fugaz que una de tus mejores paradas con el "oh" de Anfield de fondo) y porque ahora sólo vale desearte toda la suerte del mundo en tu aventura alemana , darte las gracias por tanto y tanto que nos has dado y porque como tú mismo has dicho: "Once a Red Always a Red". Y tú, Pepe, siempre serás uno de los nuestros.

Un red.



YNWA



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