Shefki Kuqi jugador finés de orígen kosovar, nació en la ciudad de Vucitrn población que pertenece a la provincia de Kosovo. La vida era normal para Shefki y su familia en sus primeros años de niñez, sin embargo, tras la caída del comunismo y la reorganización política de los países satélites de la antigua Unión Soviética, en la región de los Balcanes la situación de armonia tornó en crispación y violencia étnica. La familia Kuqi había ayudado en la construcción de casas para los serbios, lo que hizo que tras el alzamiento militar de Serbia contra la comunidad kosovar, la familia Kuqi no fuera bien vista en la localidad de Vucitrn.

No quedaba otra que irse de Kosovo y de la región de los Balcanes y huir de aquel estado de caos, venganza y genocidio. La familia Kuqi partió una noche de 1989 camino de la fría Finlandia. El viaje no sería fácil, tras un viaje en tren hacia la capital serbia, Belgrado, en el que cada familiar partió por separado y con una maleta distinta para no llamar la atención, los Kuqi llegaron a Gdansk, Polonia. Desde donde cogieron un ferry hacía Finlandia. La familia se había disgregado casi al completo. El padre y cabeza de familia fue detenido en el campamento de Mikkeli (Finlandia) aunque finalmente se le concedió el visado y pudo reunirse con el resto de la familia finalizando así el calvario.

El joven Kuqi empezaba entonces su carrera futbolística en el país escandinavo, alejado ya de la barbarie bélica. El KaPa-51 sería el equipo finés que le daría la oportunidad de formarse como futbolista. Tras pasar por varios equipos en Finlandia, haría las maletas en busca de nuevas y más provechosas oportunidades. Inglaterra estaba en el horizonte.

Con 25 años llegaba a la cuna del fútbol. El Stockport County en Enero del 2001 se hacía con sus servicios. No se equivocaron los Hatters en la contratación de Kuqi, ya que esa temporada con sus goles salvo al County de descender. Sus buenos registros goleadores hicieron que el Sheffield Wendnesday se fijara en él. 19 goles en 60 partidos le valieron para que conjuntos de mayor entidad se interesaran en el finés. En Septiembre del 2003 se comprometía con el Ipswich Town, allí compartiría delantera con Darren Bent Fue aquel año cuando se le empezó a apodar como “El finés volador”. Tal sobrenombre se lo ganó debido a que cada vez que marcaba un gol él “volaba” estirando sus brazos, lanzándose hacía adelante y aterrizando con su vientre en el césped. Lo que se podría denominar una “panzada” en toda regla, que le convirtió en una estrella en los programas de fútbol de Inglaterra. Los aficionados deseaban que el finés marcara un gol para ver ese “vuelo” una vez tras otra.

La fama de esta manera de celebrar los goles le llevó a ser seguido por los equipos de la Premier y primero el Blackburn Rovers y después del Crystal Palace serían sus siguientes destinos donde hacer exhibiciones de sus “vuelos”. Tras un paso por el equipo alemán del Tus Koblenz de la segunda alemana donde se reuniría con su hermano Njazi, el Swansea de Paulo Sousa le rescataría para volver a Inglaterra. Aunque tan sólo nueve meses confió en Kuqi el técnico portugués. Esa misma temporada se iría cedido al Derby County por un contrato de tres meses. Tras esta corta aventura en los carneros su relación con el Swansea terminaba. Su próximo destino sería el Newcastle de Alan Pardew que había tenido la baja de Andy Carroll que fichaba a golpe de talonario por el Liverpool. Los Magpies se hacían con sus servicios por unos meses. Tras no marcar ningún gol en los 6 encuentros que disputo, la aventura en St. James' Park terminaba.

Siguiente parada, el Oldham Athletic. Este aguerrido delantero llegaría a los Latics a inicios de la presente temporada. Este internacional con Finlandia 62 veces, que se retiró de la selección finesa hace unos años, ha marcado ya 8 goles con el equipo de Paul Dickov, nuestro rival mañana en la 3ª ronda de la FA Cup.